Muchas veces, hay muebles en casa que piden a gritos un cambio de imagen. Pero no siempre tenemos los recursos o el dinero para sustituirlos. Por eso, darles una pincelada puede ser la solución para renovarlos. Existen numerosas maneras de convertir muebles aburridos o sin gracia en novedosos y diferentes. ¡Aquí tienes algunos trucos sencillos, económicos y originales para dar un lavado de cara a tu mobiliario!
Un toque de color
Para los amantes del color, incorporarlo a los muebles es una apuesta muy alegre. Se pueden utilizar diferentes combinaciones y tonos, según el gusto. Por ejemplo, en un entorno con muebles negros, una opción sería modificarlos empleando colores en escala de blancos, grises, plateados y negros, para darle un toque más llamativo. Si, en cambio, queremos contrastar algunas piezas con otras, como las sillas o decorar la mesa del comedor, podemos añadir colores brillantes.
Los radiadores, de los que muchas veces nos olvidamos, también se pueden pintar. Podemos escoger el mismo color que la pared, o el fondo en donde se vaya a colocar, para que se camufle y resulte más discreto. ¿Y habíais pensado alguna vez en pintar las puertas? Sobre todo cuando las habitaciones son de decoración sencilla, ¡el resultado es súper creativo!
Entorno vintage
Hoy en día, la alternativa de darle un aire “vintage” o rústico a nuestro hogar es toda una tendencia. La idea es envejecer el aspecto de los muebles para que parezcan antiguos, convirtiéndolos en verdaderas reliquias. Es muy fácil, solo necesitas pintura de imprimación.
Lo primero que hay que hacer es lijar el mueble. Después, se aplica la primera capa de pintura de imprimación, y cuando esté seca, una de color marrón que recuerde a la madera oscura original. Luego, se frotará una vela para darle un toque desgastado, y se aplicarán un par de capas de pintura del color que se prefiera, ya sea brillante u opaca. Utilizando una lima fija, habrá que retirar la pintura de las partes donde haya cera para que se vea el color de la base. Como remate final, se puede barnizar el mueble para obtener un mejor resultado.
Aire artístico
El papel pintado también se está poniendo muy de moda. Además, cada vez existen más estampados, diseños y colores entre los que elegir. Aunque, lo más común es utilizarlo en las paredes, también sirve para rediseñar muebles. Es fácil, rápido y práctico, y permite cambiarse cuantas veces se quiera. Solo hay que encontrar el estilo que más nos apetezca y ponerse manos a la obra.
Recuerda que lo más importante es echarle imaginación. Aunque solo sean muebles, forman parte del hogar y son capaces de reflejar nuestra personalidad. ¡Atrévete con la originalidad!