La decoración nórdica, también conocida como estilo escandinavo, se ha puesto de moda en nuestros hogares. Aunque, su consolidación en sus países de origen, data de las décadas de los cincuenta y los sesenta. Ahora puedes disfrutar en tu casa de los detalles de la decoración que ha hecho popular este estilo.
En primer lugar, debes pensar en cómo es la vida en Escandinavia (Suecia, Noruega, Finlandia y Dinamarca), marcada por el frío y la escasez de horas de sol. Por lo tanto, no te sorprenderá que el acondicionamiento de los hogares nórdicos sea práctico y funcional. También se trata de un estilo que evoca una fusión con la naturaleza de sus países.
Materiales
En relación con estas zonas, la madera traída de sus bosques (pino, haya, arce, roble…) juega un papel fundamental en el mobiliario, el suelo e, incluso, los accesorios.
Se usan las tonalidades más claras de esta madera, en la línea de la sencillez y el minimalismo característicos de la decoración nórdica.
Diseño y color
Las formas tienden a ser sencillas y se evitan distribuciones recargadas. Estos espacios transmiten una sensación de tranquilidad a través de los tonos claros empleados (grises, cremas…) y, al mismo tiempo, espaciosa.
Como rasgo esencial, destaca, por tanto, el color blanco, que cubrirá las paredes e, incluso, el suelo, si se utilizan laminados con esta tonalidad. Para los contrastes puntuales de colores neutros se reservan los accesorios, elementos funcionales (vigas, chimeneas…) o textiles (mantas, colchas, cojines…).
Accesorios
Como accesorios, puedes ver en los salones de inspiración nórdica elementos de estilo vintage industrial o descontextualizados. Algunos objetos decorativos (de cocina, plantas naturales…) se ubicarán a la vista, como piezas de exposición.
Obviamente, la disposición de estos complementos, en ningún caso, ocupará espacios innecesarios o creará sensación de agobio o desorden. Como parte de la organización de estilo escandinavo, se contará también con dispositivos de almacenaje suficientes.
De la misma manera que se juega con un efecto amplificador de las habitaciones, puedes comprobar que, tanto por necesidad como por gusto, se busca maximizar la luminosidad y la claridad. Se trata de aprovechar la entrada de los rayos de sol y, para potenciarla, se dejan desnudos los ventanales o cubiertos con telas livianas y claras. Por otro lado, la potencia y la blancura sobresalen en la luz artificial empleada. Se descartan los juegos de luces y sombras.
Decorar a la manera nórdica tu casa no supondrá un gasto excesivo para tu bolsillo. Se puede echar mano de mobiliario industrial de segunda mano o piezas compradas en grandes superficies.
En definitiva, la decoración nórdica es una opción de moda para llenar de comodidad y estética el hogar que te podéis permitir a un precio módico.
Comments 2
Hola! Muy chulo el artículo, pero falta darle énfasis a la pintura. La utilización de colores blancos en una gama variada, 2-3 tonos de blanco, crea un aspecto radiante y nórdico. Es una decoración muy indicada para estancias luminosas y que puede no quedar tan bien en viviendas con mucha iluminación artificial
¡Hola! Muchas gracias por tu consejo 🙂