Las avellanas son frutos secos originarios de China, pero debido a su sabor, versatilidad y especialmente a sus muchas propiedades para la salud, su cultivo y consumo se ha generalizado por todo el mundo. Y no es de extrañar, pues pocos alimentos concentran tantas virtudes como las avellanas.
Si quieres descubrir las propiedades de las avellanas y sus beneficios para el organismo, hoy estás de suerte.
Entre las propiedades más importantes de las avellanas encontramos las siguientes:
Como todos los frutos secos, las avellanas son ricas en grasas monoinsaturadas, especialmente el ácido oleico, como ocurre con el aceite de oliva. También contiene grasas poliinsaturadas, como el ácido linoleico.
Otra de las propiedades de las avellanas es su aporte vitamínico, entre el que destaca la vitamina E, así como en fitonutrientes: fitoesteroles (especialmente betasitosterol) y protoantocianidinas.
Las avellanas también son una buena fuente de minerales como calcio, fósforo y magnesio, indispensables para el crecimiento; así como de manganeso.
Y tras descubrir sus propiedades, seguro que te estás preguntando cuáles son sus consecuencias. Pues bien, no vas a tener que esperar mucho para saberlo pues ahora te vamos a contar cuáles son los beneficios de las avellanas para la salud.
Por ser ricas en grasas buenas y fibras, las avellanas ayudan a combatir los niveles altos de colesterol LDL (el malo), de triglicéridos y aumentar el colesterol bueno. Asimismo, gracias a su contenido de vitamina E, podemos decir que uno de los grandes beneficios de las avellanas es que favorece la disminución de la inflamación en el organismo, disminuyendo el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares.
La presión arterial también se ve beneficiada por el consumo habitual de Además de esto, gracias a su aporte de magnesio, ácido fólico y de potasio, las avellanas también podrían ayudar a controlar la presión arterial, debido a que ayudan a mantener la salud de los vasos sanguíneos.
Las avellanas son ricas en ácido fólico, magnesio y zinc, todos ellos indispensables para el buen funcionamiento neuronal. Este beneficio es una de las claves para la recomendación de que tanto niños como personas mayores han de comer avellanas para mejorar su aprendizaje y la memoria, respectivamente.
Gracias a la fibra, el ácido oleico y el magnesio, las avellanas son capaces de reducir el nivel de azúcar en sangre, lo que las convierte en las grandes aliadas de los diabéticos.
Todos los frutos secos son ricos en fibra, pero en el caso de las avellanas el aporte es aún mayor. Esto hace que cuando las comes, te genera una sensación de saciedad que hace que comas menos de otro tipo de alimentos. El momento ideal para comer un puñado de avellanas es a media mañana y a la hora de merendar.
Como puedes ver por sus propiedades y beneficios de las avellanas son tantos y tan importantes, que su consumo debiera ser muy habitual para todos…excepto para los alérgicos y para aquellos que sufren de obesidad. Por supuesto, su consumo debe ser habitual pero en cantidades moderadas, para evitar una sobredosis de fibra, lo que te provocará fuertes dolores intestinales.
Existe una creencia generalizada de que los frutos secos engordan, también las avellanas. Pues bien, científicamente, no hay ningún estudio que avale esta idea.
Uno de los grandes beneficios que tiene comer avellanas es que previene la falta de hierro, ya que interviene en la formación de glóbulos rojos; y por otro lado, estimula el sistema inmunológico, lo que permite al organismo a hacer frente a posibles enfermedades.
Como hemos dicho ya anteriormente, las avellanas tienen mucha fibra, un nutriente indispensable para gozar de un tránsito intestinal correcto. Así que si estás en una de esas etapas en las que te cuesta ir al baño, nada como un puñado de avellanas para poner fin al problema.
Afortunadamente, beneficiarse de las propiedades de las avellanas es muy sencillo, pues puedes comerlas crudas, tostadas, en cereales, como topping en ensaladas y yogures. Incluso, como ingrediente en repostería o para hacer salsas que acompañen a carnes.
Entre 20 y 30 gramos de avellanas diarias te aporta unas 130 calorías, una cantidad muy equilibrada para disfrutar de los beneficios de las avellanas .
EL fruto seco más similar a la avellana es la almendra. Y no es solo es similar en su forma, sino también su sabor y sus propiedades y beneficios, aunque la almendra posee un porcentaje un poco más elevado que la avellana en fibras, vitaminas y grasa.
Un ejemplo de la similitud entre almendra y avellana la tenemos en que ambos frutos secos se utilizan indistintamente para elaborar una de las cremas más deliciosas de repostería. Nos referimos al praliné, cuya receta te recordamos a continuación.
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