Hábitos saludables

Descubre todos los tipos y clases de yogures

clases de yogurt

Si hay un alimento que se caracteriza por la variedad esa es, sin duda, la de los yogures.
Y es que son tantos los tipos de clases de yogur que existen en el mercado, que en ocasiones puede llegar a ser complicado decidirse por uno.

Para poner un poco de luz en el lineal de los yogures, hoy vamos a hablar de las clases de yogurt que existen.
¿Estás preparado?

  1. Yogur natural, un clásico

    Es el yogurt por excelencia, el más clásico dentro de los tipos. Está elaborado a partir de leche de vaca y fermentos lácticos. Es precisamente por esta sencillez en su composición por el cual está considerado como el más saludable de todas las clases de que existen.

    Dentro de los yogures naturales, podemos encontrarnos con ciertas variedades, como son los desnatados y con o sin lactosa.
  2. De sabores

    Para los que no les gusta el sabor al natural, pueden disfrutar de los beneficios de los yogures de sabores. En este caso, su composición es bastante más química que en el caso anterior, pues se les añade azúcar, aromas y colorantes.
  3. Con fruta o frutos secos

    Existe una tercera clase de yogures que supone la combinación de los dos anteriores. Nos estamos refiriendo a la mezcla del natural con trozos de fruta. En ese sentido, esta opción recoge lo mejor del yogurt natural y el sabor y los beneficios de la fruta. Es por tanto, una opción muy saludable.

    Otra variedad la tenemos en el clásico natural mezclado con frutos secos, una delicia para todos los sentidos.

    Esta clase de yogures puedes encontrarla en cualquier supermercado, pero también puedes hacerla tú mismo. Basta con coger uno natural y mezclarlo con los trozos de fruta que más te gusten o con un puñado de frutos secos.
  4. El yogur griego

    Otra clase que nos podemos encontrar en el lineal de lácteos es el yogur griego. Se trata de una variedad elaborado a partir de leche coagulada obtenida por fermentación láctica, y al que se le añade nata o crema láctea. De ahí que su textura sea más cremosa que la del normal. Además, se caracteriza por las proteínas y el calcio, siendo además una fuente de potasio, magnesio, vitamina A y vitaminas del grupo B.

    Al igual que el yogurt natural, lo puedes encontrar de sabores y con trozos de frutas.
  5. Y para veganos… yogur de soja

    El veganismo también ha llegado al mundo del yogur, y para aquellos que no quieren consumir productos de origen animal tiene a su disposición los yogures de soja.
    Este producto, como su nombre indica, está elaborado a partir de bebida de soja fermentada con bacterias similares a las de la leche de vaca para que fermenten los azúcares, acidifiquen el líquido y por tanto provoquen la precipitación de sus proteínas, consiguiendo un cuajado similar al del yogur.

En los últimos tiempos, en los lineales de yogures se está haciendo un hueco el Kéfir, un lácteo de sabor similar, rico en vitaminas, minerales, aminoácidos y con grandes propiedades probióticas. Te recordamos cuales son los beneficios y todas las propiedades del Kéfir.

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