Organizar una barbacoa en casa es uno de los planes más deliciosos y divertidos que hay. Eso sí, después de comer, toca el turno de limpiar la barbacoa. Una tarea tediosa para algunos, pero que si sigues estos consejos sobre cómo limpiar la barbacoa será mucho más sencillo y rápido de lo que imaginas.
Para obtener el resultado deseado, además de saber cómo limpiar una barbacoa es fundamental saber el momento más idóneo para hacerlo. Y ése es, sin duda, cuando la barbacoa está aún un poco caliente.
A continuación, y ayudado por un cepillo, es importante retirar los restos de comidas y cenizas que pueda haber.
Además, es importante saber que la barbacoa no solo es parrilla y carcasa. Cuando se limpia la barbacoa hay que limpiar todo el aparato, con especial hincapié en rendijas y lubricar los puntos móviles, como son las ruedas.
Y después de limpiar la barbacoa, también se aconseja utilizar productos que la protejan de las inclemencias meteorológicas durante los meses de invierno. El mercado ofrece una multitud de sprays formulados para crear una película que además de cuidar, también aportan brillo.
A la pregunta de cómo limpiar una parrilla de hierro, la respuesta es sencilla: jabón quitagrasas y agua. Primero, moja la parrilla y después pásale un estropajo con jabón y frota quitando toda la grasa. Sécala con un paño y listo.
Además de grasa, es la barbacoa se acumula carbón. Y aquí tienes algunas ideas para saber cómo limpiar la parrilla:
Existen varias formas de barbacoas, una de las más populares es la de obra. En este caso, la mejor forma de limpiar una barbacoa de obra es utilizar agua a presión para retirar el hollín, haciendo especial hincapié en las juntas y las paredes.
En el caso del ladrillo, para retirar la suciedad, lo mejor es mezclar agua, lavavajillas y sal. Seguidamente, frota toda esta mezcla en las paredes de la chimenea y mediante un guante elimina toda la suciedad de las juntas y deja actuar la mezcla durante una hora. Pasado el tiempo, elimina la mezcla con un cepillo y pásale agua con una manguera.
También puedes pasar un trapo húmedo con agua tibia mezclada con bicarbonato de sodio para repasar las paredes interiores y todo el exterior.
Añade una capa gruesa de bicarbonato de sodio sobre el ladrillo para que se pueda absorber la grasa y déjalo actuar unos 10 minutos. Más tarde, limpia el bicarbonato con un trapo y finalmente con un cepillo lleno de jabón de lavaplatos restriégalo por el ladrillo para sacar la suciedad más incrustada. Para acabar añádele agua con un trapo y deja que el ladrillo se seque al aire.
Otro de los “peros” que tiene limpiar la barbacoa es retirar las cenizas que se forman durante el cocinado y qué hacer con ellas.
Pues bien, para quitar las cenizas, lo mejor es retirarlas con un cepillo y tíralas en un cubo de metal o en una olla de cerámica. Déjalas que se enfríen completamente y tíralas en una bolsa de basura.
Y ahora que tienes limpia y reluciente tu parrilla, ¿por qué no organizas una nueva comida en el jardín de tu casa? Te damos algunas ideas para organizar la mejor barbacoa del barrio.
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