Trucos y tips

¿Cómo se limpian las puertas de madera barnizadas?

COMO LIMPIAR PUERTAS DE MADERA

¿Se limpia de la misma manera una puerta de madera barnizada que lacada? La respuesta es rotundamente no.

Existen diferencias y para ayudarte a saber cómo limpiar puertas de madera y lacadas, aquí tienes algunas recomendaciones clave.
¡Toma nota!

Cómo limpiar puertas de madera

El polvo es uno de los agentes que más dañan el barniz de las puertas, por esta razón, es fundamental limpiar las que son de madera muy frecuentemente. Lo ideal es hacerlo todos los días, pero es comprensible que el ajetreo de la vida diaria impida hacerlo.
En ese caso, la frecuencia de limpieza debe ser de una vez por semana y nunca más de cada 15 días, pues entonces ya habrá mucho polvo acumulado.

Ahora que ya tenemos establecido la frecuencia de limpieza, ¿cómo se limpian las puertas de madera?
Pues bien, todo dependen de lo sucias que éstas estén:

  • Así, si sólo tienen polvo, lo mejor es que pases un plumero o un paño de microfibra por toda la superficie de la puerta, sin olvidar las molduras ni los marcos.
  • Si tienen bastante polvo, pásale una bayeta mojada con agua jabonosa. Después, sécalo bien con un paño seco.

Si las puertas tienen cristales, límpialos con un limpiacristales y sécalos con otro paño diferente del que has utilizado para retirar el polvo de las puertas.

Si por alguna razón, presentan otro tipo de manchas más resistentes y dañinas que una simple capa de polvo, no te preocupes, porque hay remedios con los que tus puertas de madera volverán a recuperar su brillo y esplendor.

  1. Alcohol inorgánico o un disolvente universal

    Para quitar las manchas, frota la mancha con un paño limpio e impregnado con este producto. Si además hay rayas, no olvides dar el producto en la dirección que tenga el rayajo.
  2. Cera para muebles

    Que una puerta tenga rayas es muy habitual. Para taparlas, aplica un poco de cera para muebles y después frota con otro paño para sacar brillo.
  3. Si hablamos de grasa incrustada

    Un truco que funciona muy bien es el uso de polvos de talco sobre la mancha en concreto. Una vez recubierta, lo dejaremos actuar unos minutos para, después, retirarlo con un paño húmedo con agua y jabón neutro.

Si aun así las manchas siguen persistiendo, también son más que recomendables el agua de limón y el vinagre. Si nuestras abuelas los usaban para la limpieza general del hogar y así brillaban, será por algo.

Cómo limpiar puertas lacadas en blanco

La vida media de una puerta lacada es de unos 15 años. Partiendo de esto, y de que es normal a pesar de cualquier esfuerzo que amarilleen algo con el paso del tiempo, al estar lacadas, acumulan menos polvo. Con pasar un plumero y un paño húmedo con jabón neutro cada dos semanas, el resultado será más que óptimo.

No es recomendable usar productos abrasivos. El lacado, como decíamos, es mucho más sensible y delicado que la madera al natural. Aunque acumula menos polvo, sí que es muy fácil ‘hacerles daño’. Así que en el caso de que hubiera manchas más complicadas, recurriríamos a alcohol diluido en agua.

Evitar el estropajo. Aunque no lo habíamos mencionado, aquí es todavía más importante no caer en su uso, a pesar de que veamos una mancha grande. Seguramente rayaríamos el lacado o podría terminar desapareciendo en partes.

Y ahora que ya sabes cómo limpiar las puertas de madera, no está de más recordar cómo se limpian los muebles de madera. Y es que la madera es un material delicado que para lucir bonito debe ser cuidado cómo se merece.
Toma nota.

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