Después del lavado, el pelo está suelto, brillante y fresco. Pero, para algunas, esa sensación no dura más de un día. Si tienes el pelo muy fino o el cuero cabelludo graso, seguro que al segundo día ya notas que está aplastado y apelmazado en las raíces. Para evitar tener que lavarlo con frecuencia, existe una opción que te permite disfrutar de un día más de cabello limpio: el champú seco.
Lavarse el pelo muy a menudo conlleva un riesgo. Si lo tienes graso, lavarlo a diario solo conseguirá que se engrase más rápido. Cada vez que nos lavamos el pelo, retiramos la capa de aceite que fabrica nuestro cuerpo para nutrir la cabeza y el cabello. Si la retiramos muy a menudo, el cuero cabelludo lo interpretará como una señal de que necesita producir más aceite. Por eso, nuestro pelo no aguantará limpio mucho tiempo.
El champú seco es especialmente útil para cabellos finos, ya que se engrasan y pierden volumen con más facilidad.
Es una buena opción para posponer el lavado un día más. Este absorbe el aceite del pelo, pero no el del cuero cabelludo, por lo que puede considerarse un lavado a medias. También es útil si has tenido el pelo recogido todo el día y al soltarlo se queda aplastado. El champú seco levanta la raíz y crea volumen.
¿Cómo se utiliza?
Cuando notes que las raíces empiezan a estar un poco grasas, cepilla el pelo para desenredarlo y hazte la raya donde suelas llevarla. Después, agita bien el bote de champú seco y pulveriza las raíces a lo largo de la raya. Procura hacerlo a unos quince centímetros de la cabeza, para evitar que el aerosol pueda irritar la piel. Después, con las manos limpias, masajea el champú por las zonas grasas, levantando la raíz ligeramente con los dedos.
Verás cómo en cuestión de segundos, la mayor parte de la grasa ha desaparecido y el pelo tiene un aspecto mucho más limpio y fresco. A continuación, utiliza un cepillo para eliminar cualquier residuo del champú y terminar de peinarte.
Aviso para morenas
Si tienes el pelo oscuro, debes tener un poco de cuidado. La mayoría de champús secos tienen fórmulas de polvo blanco. Pueden dejar un tono grisáceo si no se masajea y cepilla bien tras aplicarlo. Para evitar este problema, algunas marcas han creado versiones especiales para pelo oscuro empleando una fórmula translúcida que previene que se vean los restos.
Imágenes vía L’Oreal.