Están principalmente en nuestra cocina y en el baño, pero no siempre nos acordamos de su limpieza, o cuando la hacemos, no la realizamos correctamente.
Por eso, hoy te traemos unos trucos para que tus azulejos brillen por sí solos.
Si no te has esforzado mucho en las juntas de los azulejos, quizá hayas visto que ya no tienen el mismo color que al principio. Para conseguir eliminar la suciedad de estas partes, coge un cepillo de dientes viejo, mezcla agua y lejía y frota en las juntas de los azulejos. ¡Verás cómo vuelven a su color natural!
En el caso de que tus azulejos tengan marcas de agua que ya no se van con nada, prueba a realizar una limpieza con vinagre. Crea una mezcla de vinagre y agua, frota con una esponja las manchas de agua que aparecieron en tus azulejos y verás cómo desaparecen. A continuación, tendrás que secarlas bien con un trapo.
Los azulejos de la cocina suelen acumular grasa y aceites que se desprenden al cocinar, por lo que limpiarlos frecuentemente es algo importante.
Para llevar a cabo una buena limpieza, mezcla en un cubo lleno de agua un chorro de jabón y remuévelo hasta que consigas que se formen burbujitas. Con una esponja comienza a frotar por toda la superficie de los azulejos.
A continuación, haz otra mezcla, esta vez con jabón desengrasante, y pasa de nuevo por todos los azulejos.
Por último, pasa un trapo seco y limpio y quita los restos de agua que hayan quedado sobre los azulejos para que no se estropeen.
El baño es algo que usamos diariamente. Si no lo secamos bien, cada vez que nos duchamos o usamos el baño los azulejos pueden terminar acumulando mucha humedad y generando moho.
Para evitarlo, es fundamental una buena ventilación del cuarto de baño y secar con un paño los azulejos cada vez que nos duchamos.
Pese a que tengas esta rutina, deberás realizar a menudo una limpieza más profunda. Para ello, prepara un cubo de agua caliente y añade dos cucharadas grandes de amoniaco.
Empapa una esponja con esta mezcla y frota directamente la superficie de los azulejos: de este modo conseguirás desinfectar los azulejos.
Para terminar, seca toda la superficie con un paño seco para evitar que se forme moho.
Si queremos sacar brillo a nuestros azulejos, tanto del baño como de la cocina, después de realizar la limpieza que te recomendamos pulveriza un poco de limpia cristales y frota toda la superficie para que queden perfectamente relucientes.
Una vez que ya lo tengas bien limpio, es momento de pensar en cómo iluminar un baño, para que puedas aprovechar al máximo los puntos de luz.
Estos son solo algunos trucos, pero, ¿cuál utilizas tú para fregar los azulejos? ¡Cuéntanoslo en los comentarios!
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Me gusta la sección consejos. Pero tengo una queja y no se donde dirigirla. La encuesta que hace Día. En ningún momento pregunta por el tiempo de espera en caja. Vivo en Esta Coloma de Farners y hay un Máximo Día. He dejado de ir asiduamente por este motivo.
Hola Ángeles! Retransmitimos tu queja al departamento correspondiente. Un saludo
megustatodo lo DIA PORDUZTOS BUENISIMOS Y DE CALIDAZ