Aunque a simple vista cueste averiguar cuál es uno y cuál la otra, existen muchas diferencias entre plátano y la banana, no solo físicamente, sino por la forma, el color de la piel, el sabor, la textura y hasta en sus propiedades nutricionales. ¿Quieres conocerlas? Pues sigue leyendo.
Como hemos dicho anteriormente, a priori el plátano y la banana tienen un aspecto bastante similar. Sin embargo, existen algunas diferencias entre ambas frutas que cuando las conoces te va a resultar muy sencillo diferenciarlas a simple vista. Así, los plátanos tienen una forma curva, mientras que la banana es una fruta bastante recta.
También existe una notable diferencia en cuanto al grosor y el tamaño. Los plátanos son más finos, ligeros y pequeños que las bananas, que suelen tener un calibre bastante más considerable.
Otra diferencia entre plátano y banana a simple vista está relacionado con el color de la piel. El plátano tiene unas características manchas en la piel, que salen a lo largo del proceso de maduración y que la banana no posee. Posiblemente, ésta sea la diferencia más conocida, que nos permite saber si nos estamos comiendo una fruta u otra.
Y ya en boca, la diferencia radica en la textura del bocado. La pulpa de la banana es más áspera y seca que la del plátano, que muy suave.
La banana y el plátano no sólo se diferencian en el exterior. Su composición nutricional también es diferente. Aunque hay algo que tienen en común: las dos son frutas altamente nutritivas que no deben faltar nunca en nuestra dieta.
Ambas son ricas en minerales. En el caso del plátano, destaca la presencia de potasio y fósforo, lo que le hace un alimento especialmente recomendable para los hipertensos. Por su lado, la banana es muy valiosa por sus valores en sodio, calcio, hierro, zinc, cobre y manganeso.
Al tratarse de fruta, la presencia de fibra es una de sus riquezas nutricionales de ambas. Además coinciden en la presencia de taninos en su composición, lo que les otorga la función de alimentos astringentes. Por eso, en los casos de diarrea es muy bueno tomar cualquiera de las dos.
Otra diferencia es la cantidad de hidratos de carbono que tienen uno y otro. Así, la banana tiene más hidratos de carbono que el plátano. Además, éste tiene menos almidón y más sacarosa, glucosa y fructosa que la banana.
Estamos seguros que ahora que sabes todas las diferencias entre una y otra fruta te será muy fácil distinguirlas. Aunque lo más importante es que las comas, pues ambas son muy nutritivas, ya sea en pieza o en otras elaboraciones como puede ser en batido, bizcocho o galletas. Por ejemplo, te recordamos la receta de galletas de avena y plátano.
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