Ejercicios de respiración ¡Mantén el estrés a raya!

Los ejercicios de respiración se han convertido en el mejor remedio para superar los momentos más estresantes del día. Buscar un lugar tranquilo y dedicar unos minutos a relajarte puede evitar que caigas en un ataque de nervios. Y, aunque muchos utilizan para relajarse con gadgets específicos, como puede ser un masajeador cervical, lo cierto es que los ejercicios de respiración puedes hacerlos en cualquier momento y lugar sin necesitar nada más.

¿Sabes cuáles son los ejercicios de respiración más efectivos?
Hoy te damos algunas claves para que mantengas el estrés a raya.

Respiración Equitativa

Esta forma de respirar es especialmente beneficiosa poco antes de irse a la cama, especialmente si tienes problemas para dormir. La función de este ejercicio es ayudar a tu mente a desconectar de los pensamientos que impiden que descanses.

¿Cómo se hace?

Comienza inhalando por la nariz y cuenta mentalmente hasta cuatro. A continuación, exhala (también por la nariz) contando hasta cuatro.
Cuando cojas cierta destreza con esta técnica de respiración, ve alargando la inhalación y la exhalación. De hecho, si vas a yoga, probablemente puedas aguantar contando hasta 6 u 8.
Con este ejercicio, además de relajarte, estarás trabajando la concentración y reducirás el estrés.

Respiración abdominal

Los ejercicios de respiración abdominal consisten en respirar con el diafragma de una manera lenta y pausada; es algo tan sencillo que puede aliviar los síntomas de la ansiedad de forma eficaz, además de resultar una estupenda técnica de autocontrol.

¿Cómo se hace?

Inhala por la nariz despacio y profundo mientras cuentas hasta tres, intentando llenar los pulmones y observando cómo el abdomen sale hacia fuera.
Realiza una pequeña pausa de pocos segundos y suelta el aire por la boca mientras cuentas hasta tres lentamente. Notarás que el abdomen se mete hacia dentro.
Más que hacerla en un momento puntual de estrés, la respiración abdominal es aconsejable practicarla de manera diaria durante 10 minutos. Notarás sus beneficios al cabo de unas semanas.

Respiración alternada por las fosas nasales

Esta respiración trae calma y balance y une las regiones derecha e izquierda del cerebro. Es una técnica de respiración que funciona bien cuando se busca concentración y energía, por lo tanto, no es conveniente hacerla cuando vayas a dormir.

¿Cómo se hace?

Comienza el ejercicio adquiriendo una postura cómoda de meditación. Tapa la fosa nasal derecha con el pulgar derecho e inhala profundamente a través de la izquierda.
Al llegar al pico de la inhalación, tapa la fosa nasal izquierda y exhala a través de la fosa nasal derecha. Continúa este patrón, inhalando por la fosa nasal derecha, luego cerrándola con el pulgar derecho y exhalando a través de la fosa nasal izquierda.

“Respiración del Cráneo Brillante”

¿Cómo se hace?

¿Te cuesta despejarte por la mañana? Lo mejor para comenzar el día con energía es respirar con una larga y lenta inhalación, seguida de una rápida exhalación. Cuando ya tengas dominada la técnica, acelera la repite el ejercicio con un ritmo más rápido hasta 10 repeticiones.

Respiración con relajación progresiva de Jacobson

La relajación progresiva de Jacobson es una técnica de relajación muy utilizada para reducir la ansiedad y el estrés reduciendo la tensión muscular.

Para aliviar tensiones desde la cabeza a los pies, cierra los ojos y concéntrate en tensionar y relajar cada grupo de músculos durante dos o tres segundos cada uno. Comienza por los pies y sube hasta llegar a los ojos, siempre manteniendo una respiración profunda y lenta.

Además de la respiración, hacer un poco de ejercicio físico también te ayudará a vivir de manera más relajada. En este sentido, el yoga puede ser el complemento perfecto, pues además de ayudarte a tomar la vida con más calma, experimentarás otros muchos beneficios físicos. Descubre sus beneficios.