Maquillarse en verano se ha convertido en algo solo para mujeres valientes. Que te salgan brillos o que la pintura se corra sobre el rostro, son motivos suficientes para desistir de ello. Sin embargo, cualquier fémina coqueta que se precie tiene en su neceser polvos matificantes que le ayudarán a brillar sin necesidad de que lo haga su piel. Si eres de las que aún no tiene muy claro cómo o cuándo hay que aplicarlos, nosotros te lo contamos.
Para empezar, los polvos matificantes, como su nombre indica, sirven para matificar el rostro. Consigue un acabado de maquillaje perfecto, fijando el color y prolonga su duración. Además, son perfectos para absorber el exceso de humedad o de brillo en la cara, especialmente en la zona de la nariz, frente o mentón. Si los utilizas, comprobarás que el maquillaje resistirá todo el día.
¿Cuándo hay que utilizar polvos matificantes?
Los maquilladores profesionales siempre recomiendan utilizar polvos matificantes para conseguir un aspecto suave, resistente e impecable. Pero, se hace especialmente necesario si tienes la piel grasa. Aunque utilices un maquillaje especial, es fundamental que apliques polvos matificantes para eliminar el exceso de brillos.
Si eres de las que cree que tu maquillaje dura poco, prueba a aplicar polvos matificantes sobre la base de maquillaje y conseguirás que se fije durante horas. Asimismo, puedes utilizarlos también para sellar el color de la barra de labios, el colorete e incluso la sombra de ojos.
¿Cómo se aplican?
- El protocolo de maquillaje siempre empieza sobre la piel limpia. Utiliza tu crema hidratante habitual para evitar que tu maquillaje se reseque o cuartee.
- A continuación, aplica una base de maquillaje para tapar las imperfecciones y alisar el rostro. En el caso de que tengas ojeras o algún granito, utiliza un corrector.
- Ahora es el momento de usar los polvos de maquillaje con almohadilla o con una brocha específica. Aplica el producto por la frente y continua por el tabique de la nariz y barbilla mediante movimientos circulares.
También, los puedes usar en las mejillas para dar naturalidad al colorete y sobre las sombras de ojos y labios para fijarlos. Utiliza una buena brocha y siempre con movimientos que vayan del centro a los lados.
Si quieres conocer otros consejos, descubre más trucos de maquillaje en nuestro blog.