Aunque aún es algo pronto para taparse con el edredón, sí ha llegado el momento de ponerlo a punto para cuando las noches empiecen a ser más frescas. Para ayudarte en la tarea, hoy compartiremos contigo algunos trucos para limpiarlo tú mismo en casa.
Aunque la mayoría de la población prefiere llevar la ropa de cama de abrigo (ya sea manta o nórdico), a una tintorería, limpiar el edredón también es posible hacerlo de una manera doméstica.
Sigue nuestras instrucciones y disfrutarás de unas noches muy cálidas.
Lo primero que debes saber que ahora es el mejor momento para lavar el edredón o la manta, pues aunque las vacaciones de verano ya quedan lejos, las temperaturas aún acompañan y permitirá que se seque con cierta rapidez.
Otra dato importante, que es fundamental saber, es si el edredón puede o no lavarse. Para ello, hay que fijarse en la etiqueta que lo acompaña. Esto es así porque en ocasiones hay rellenos que no permiten lavar en lavadora, sino que requieren lavado en seco. Si este es tu caso, lo mejor es que lo lleves a la tintorería. Si por el contrario, se puede mojar, continúa leyendo.
Ha llegado el momento de meterlo en la lavadora. Si tu nórdico está pensado para una cama extra grande, es posible que tu tambor no tenga capacidad suficiente para lavarlo, por lo que entonces tendrás que meterlo en la bañera. Para el resto de casos, lo natural es que puedas lavarlo a máquina sin problema.
Si este es tu caso, tendrás que utilizar detergentes muy suaves, nada de suavizantes, pues pueden estropear el edredón, ¡y mucho menos lejía!
Como verás, aunque el edredón se pueda lavar a máquina, exige el máximo cuidado, no solo con los productos que se utilizan, sino también con el programa, que debe ser el de ropa delicada. Y cuando este finalice, asegúrate de que esté bien aclarado y que no queden restos de detergente.
Y por último, llega el momento de secar. Tienes dos opciones, o bien en la secadora a temperatura media o bien colgarlo en el tendedero para que se seque al aire. Si aprovechas esta época del año para lavarlo, lo mejor es esta segunda opción, dadas las agradables temperaturas reinantes.
Existe la creencia de que si el nórdico está relleno de plumas no se puede lavar, y nada más lejos de la realidad, si así lo aconseja el fabricante, lógicamente.
El proceso de lavado es bastante similar a los de relleno sintético. Se lava con jabón suave y se debe enjuagar muy bien, pues las plumas retienen más agua que el algodón.
Para escurrir el agua, una buena técnica es la de apretarlo a mano. Es más laborioso que el centrifugado de la lavadora, pero de esta forma te garantizas que el edredón quede en buen estado.
Y en cuanto a secado, mejor tenderlo al aire libre y siempre en sombra. Intenta que no le dé el sol directamente, especialmente en las horas centrales del día.
Además de poner a punto la cama, también tendrás que sacar la ropa de invierno para la nueva temporada. Si tienes problemas de espacio, no te preocupes, porque aquí te recordamos el Método de Marie Kondo que te ayudará a poner en orden tu casa.
¿Quieres quitar un remache? No te preocupes, hoy te damos las claves de cómo quitar un remache con taladro y…
En los menús navideños más tradicionales no suelen faltar la lombardo, de ahí que su consume se dispare en estos…
El ceviche colombiano con camarones es una variedad del tradicional peruano. Eso sí, es igual de exquisito y sabroso. Te…
La Navidad son fechas repletas de compromisos familiares y con amigos y esto exige dar nuestra mejor versión. No es…
Queda poco para dar el pistoletazo de salida a las comilonas navideñas y seguro que muchos ya tienen todo listo.…
Si hace unos días descubríamos las propiedades de la dorada, en esta ocasión vamos a descubrir los muchísimos beneficios que…