¿Eres de los que no sabes decir que no a una porción de tarta de chocolate? ¿En tu nevera nunca falta una tableta? ¿Echas mano de las galletas rellenas para picotear o haces nocilla casera? No hay duda, eres «choco-adicto». No te preocupes, salvo alguna que otra caries y algún kilito de más, esta dulce adicción no es perjudicial para salud. Eso sí, con moderación.
Pero, alguna vez te has preguntado ¿por qué el chocolate gusta tanto a millones de personas en el mundo? Da igual la nacionalidad, la edad, la razón social… para casi todo el mundo el chocolate es uno de grandes vicios.
En el post de hoy vamos a reflexionar sobre cuáles son los motivos que hacen del chocolate uno de los alimentos mejor valorados.
Según los psicólogos, son varias las razones. Algunas tienen su origen en la composición del chocolate. Y otras, están relacionadas con la psicología. Empezamos por las primeras.
El cacao contiene más de 300 sustancias químicas, entre las que se encuentran algunos estimulantes, como la cafeína y la teobromina, y la feniletilamina, que es una sustancia que también se produce de manera natural en el cerebro y que está relacionada con el amor. Al parecer, las personas enamoradas contienen grandes cantidades de feniletilamina, y esto produce excitación, insomnio o taquicardias. Por eso, algunos estudios han demostrado que comer una onza de chocolate puede ser igual de excitante que un beso apasionado.
Además, la feniletilamina da lugar a la dopamina, que es una sustancia que puede llegar a generar adicción. ¡Qué nadie se alarme! Para generar una dependencia física al chocolate habría que consumir un elevado número de tabletas diariamente.
Eso sí, aunque no sea física, sí que son muchos los que tienen cierta dependencia emocional. ¿A qué se debe eso? Una de las razones que nos ofrecen los profesionales es que el ser humano siente una irresistible atracción hacia lo prohibido, como se puede considerar a los dulces de chocolate por su exceso calórico.
Además, hay que reconocer que cuando lo comemos, experimentamos cierta sensación de recompensa y un bienestar inmediato en ciertos momentos como pocas cosas. Es por ello, que cuando estamos tristes parece que tenemos cierta necesidad de comer chocolate para hacernos sentir mejor.
Ahora que has descubierto el por qué te gusta tanto el chocolate, da rienda suelta al placer elaborando una deliciosa tarta de chocolate con nueces caramelizadas, y si quieres probar otro tipo de postre, apunta nuestra receta de tarta de frambuesa.
Te dejamos también esta riquísima receta de tarta de galletas y coco.
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Muy buenos productos