Para lucir una piel sana y bonita es fundamental cuidarla. Pero no todos los tipos de piel son iguales ni necesitan los mismos cuidados. Dependiendo si tu piel es mixta, seca o grasa, así será tu rutina y el tipo de cosméticos que debes utilizar. No obstante, para elegir correctamente los productos que mejor te van, es fundamental saber cuál es tu tipo de piel.
Para saber el tipo de piel que se tiene es fundamental saber en qué consiste cada modalidad.
Si tienes granitos y/o espinillas en la zona T y las mejillas más secas, tu piel es mixta. Este tipo de piel se denomina así porque es la combinación de la piel seca y la grasa. Por regla general, la piel mixta presenta impurezas en frente, nariz y barbilla, y sensación de sequedad en los pómulos.
Es esta dualidad la que hace de la piel mixta la más complicada de tratar. Los dermatólogos y profesionales de la belleza recomiendan limpiar en profundidad la piel diariamente, utilizar agua tibia en vez de fría y aplicarse una crema hidratante facial especialmente formulada para la piel mixta.
¿Tienes sensación de tirantez? Incluso, ¿en ocasiones observas que se descama y te pica? Si la respuesta a estas preguntas es afirmativa, tu piel es seca. Este tipo de piel se caracteriza por tener poco tejido graso y le falta hidratación, razón por la que tiende a ser áspera y es poco elástica.
Como puedes deducir, lo que esta piel necesita es muchísima hidratación. Para ello, utiliza productos muy nutritivos, con mucho porcentaje de agua. En este sentido, los sérums y los cosméticos en formato aceite son los grandes aliados para que tu piel consiga el equilibrio necesario para lucir en su máximo esplendor.
¿Y para la piel seca del resto del cuerpo?, los profesionales aconsejan utilizar crema corporal con un importante poder nutritivo y aplicarlo periódicamente varias veces al día, en la medida de lo posible.
Aunque la alimentación está ligada estrechamente con el bienestar de la piel, en este tipo es fundamental beber mucha agua, frutas y verduras que ayuden a hidratar el cuerpo también por dentro. Conoce en este artículo más consejos y trucos para hidratar la piel seca.
La grasa es un tipo de piel que destaca porque presenta un exceso de sebo que tapona los poros, provocando el antiestético acné. Su cuidado requiere un extra de limpieza, no solo diariamente durante la rutina de belleza, sino también semanalmente con la utilización de una mascarilla depurativa con un poder de penetración más alto del habitual.
Además de esto, es fundamental utilizar productos oil free que no aporten más grasa al cutis.
También en este caso llevar una alimentación saludable es fundamental para cuidar la piel grasa. Entre los hábitos saludables destacan: beber mucha agua, seguir una dieta sana y saludable y evitar el consumo de fiambre, bollería industrial, azúcares y alimentos ultraprocesados. Y ahora que ya sabes cuál es tu tipo de piel, es importante que utilices los productos adecuados para ella. Y a ser posible, formulados con ingredientes lo más naturales posibles. La razón de esta recomendación la encontramos en los muchos beneficios que tiene para la piel la usar cosmética natural.
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