La alimentación es la base de una vida saludable. Es lo que nos da energía para enfrentarnos al día a día. Y la clave para lograr una alimentación saludable es el equilibrio: comer todo tipo de alimentos en su justa medida. Hay un grupo de alimentos que olvidamos consumir, ya sea por pereza o por falta de inspiración a la hora de incorporarlos a nuestros platos. Hablamos de la fruta y las verduras. Vamos a darte algunos trucos para que llegues a las cinco piezas diarias que recomiendan los expertos con facilidad.
Los expertos llevan hablando de la importancia de las cinco piezas diarias de fruta y verdura durante años. Estos alimentos contienen vitaminas y nutrientes que no se encuentran en otros productos. Además, se digieren rápidamente y con facilidad, por lo que no resultan pesadas de comer a lo largo del día.
Numerosos estudios han hablado además de los beneficios de la fruta y las verduras a la hora de evitar enfermedades cardiovasculares. Las personas que consumen más cantidad de vegetales y frutas reducen su riesgo de padecer este tipo de problemas.
A veces, puede complicarse lo de incorporar fruta y verdura a nuestro día a día. Si nos cuesta comerla sola, lo que podemos hacer es añadirla a otros platos para acompañarlos.
Una de las formas más sencillas de comer fruta y verdura es mediante ensaladas. Las ensaladas dan mucho juego, ya que combinan muchos ingredientes y se puede mezclar a nuestro gusto. Utiliza distintos tipos de lechuga, espinacas y aprovecha todos los beneficios de las judías verdes. Ralla una zanahoria entera y añádela a la ensalada. También puedes cortar una manzana, trozos de melón, pepino o, ahora que están de temporada, unas fresas.
Si te cuesta comer verduras por su sabor o textura, bátelas y cómelas en puré o cremas. Puedes mezclarlas con queso o con nata y leche para darles más cremosidad.
Los salteados o las verduras al horno con queso, son muy sencillos de preparar y también pueden acompañar platos de carne y darle sabor con salsas. Además, puedes ser creativo y añadir todo tipo de verduras que quieras. Este plato te puede sacar de un apuro cuando no sabes qué hacer para cenar, o si tienes poco tiempo para preparar la comida que quieres llevar al trabajo el día siguiente.
Muchas veces, olvidamos comer fruta entre horas porque no la tenemos a mano. Convierte en una rutina el meter una pieza en el bolso o mochila. Las manzanas, los plátanos, las peras o las mandarinas son frutas cómodas de comer en cualquier sitio y si las llevamos encima, podemos aprovechar mientras esperamos al autobús o vamos de camino al trabajo para picar algo.
Conoce todos los beneficios de la mandarina y comienza a llevarla contigo donde vayas.
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