El washi tape, también conocido como cinta japonesa, es el término que se usa para denominar a los rollos de papel adhesivo decorado.
El término washi se origina en Japón y proviene de un papel de arroz resistente que se fabricaba muchos años atrás. El término tape significa adhesivo en inglés.
Los hay de diferentes marcas y con infinitos diseños. Fosforitos, con estampados, con diseños infantiles, con mensajes, con purpurina o en diferentes texturas (encaje, lana, etc).
Generalmente son de 15 mm de ancho y 10 m de largo. Pero, existe una amplia variedad de dimensiones para todos los gustos y funciones.
El washi tape es un elemento decorativo que se ha puesto muy de moda últimamente. Se usa especialmente en el ámbito decorativo, aunque también es popular para hacer manualidades y envoltorios caseros. Pero realmente, el washi tape tiene tantos usos como nosotros queramos darle. Todo es cuestión de echarle imaginación y dejar que la creatividad inunde tu mente.
Desde que se popularizaron las cámaras digitales, la costumbre de imprimir las fotos se ha ido dejando aparcada. Sin embargo, decorar con fotos familiares y recuerdos sigue siendo la forma más bonita de poner nuestro toque al hogar. Hoy te proponemos ir un paso más allá y darles a tus marcos de fotos un estilo único y personal utilizando esta cinta adhesiva.
Si tus marcos de fotos se han quedado anticuados puedes darles un lavado de cara con esta cinta. Si el marco es ancho y de un color oscuro, puedes buscar una cinta un poco más estrecha y con un estampado llamativo, y colocar cuatro tiras en el centro.
Mezclar estampados también es una forma original de darles un toque diferente a tus fotos. Escoge dos diseños que te gusten y cubre la parte inferior y superior del marco con uno, y los laterales con el otro.
Si eliges colores que van con los que aparecen en la foto, conseguirás enfatizar la foto y llamar más la atención hacia ella. Por ejemplo, si quieres enmarcar una foto de la playa, escoge washi tape en tonos azules como los del mar o a rayas náuticas. Si la foto es un retrato familiar en un jardín, puedes optar por diseños florales. Por supuesto, ¡todo depende de tu propia imaginación!
Hacer agujeros en la pared para colocar ganchos donde colgar fotos no siempre es posible. Especialmente cuando vivimos de alquiler o no sabemos bien cómo poner ganchos sin estropear la pared. En estos casos, ¡hay que improvisar!
Pega las fotografías en la pared y enmárcalas directamente sobre la superficie con washi tape. El efecto es muy original, y el día que tengas que quitarlas, no quedarán marcas ni agujeros.
Esta herramienta tan sencilla y práctica se puede conseguir en papelerías, grandes establecimientos o a través de tiendas online.
Son económicos y duran bastante, así que te animamos a que escojas unos cuantos y los combines entre ellos.
Y sobre todo, te invitamos a que busques nuevos usos, pruebes con ideas creativas y le des una vuelta a tu hogar.
¡Atrévete con la originalidad!
Imágenes vía Chatelaine y Torie Jayne
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