Pediremos en la carnicería un redondo limpio de grasa y a poder ser atado, es carne que tiene que quedar apretada para que, cuando se haga, quede cocinada.
Preparamos la bresa. Pelamos el diente de ajo, las cebollas, limpiamos las zanahorias y tomates. Cortamos todo en trozos de tamaño de dados.
Sazonamos la carne con sal y pimienta. Ponemos el redondo y la bresa en una cazuela o fuente de horno e introducimos en el horno hasta que empiece a tomar color. Después, añadimos vino blanco y las hierbas aromáticas.
Tapamos con papel de aluminio y volvemos a introducir al horno durante unas 2 horas a 165 ºC. Estará hecho cuando saquemos el pincho y esté caliente.