Trocea la remolacha, los tomates, el pimiento y la cebolla y mételos todos a la vez en el vaso de tu Thermomix.
Bátelos bien y cuando formen una masa homogénea añade agua fría, sal, aceite y un chorrito de vinagre al gusto. (La cantidad de agua dependerá de lo líquido o espeso que te guste el gazpacho, vete añadiéndola poco a poco y probando hasta que consigas que quede a tu gusto).
Remuévelo bien y déjalo reposar en frío durante unas horas… ¡y listo para servir!